lunes, 10 de agosto de 2009

Quinta entrega del libro Autosuicidio para Dummies. Autosuicidio Artístico.



Si usted toda la vida se ha creído un rebelde sin causa como James Dean, un roquero incomprendido igual que Jim Morrison, un actor undergraund tipo Heath Ledger, un poeta sin luna prototipo José Asunción Silva, un escritor maldito que sigue la frase de muere joven y tendrás un cuerpo bien parecido al estilo de Andrés Caicedo. Fácil, una sobredosis de cualquier babosada: Alcohol, barbitúricos, cocaína, popper, ácidos, leche en polvo, desenfriolito, quipitos, mexana, bienestarina… siga el ejemplo de Jattin, Maupasant, Stornni, Hemingway, Hendrix, Joplin, Kubain. Claro, primero conteste estas preguntas: ¿Ya ganó un Nóbel? ¿Ya ganó un disco de platino? ¿La gente le pide autógrafos en la calle? ¿Existen 10 biografías no autorizadas sobre usted? ¿Ha compuesto algo medio parecido a Smells Like Teen Spirit? ¿Tocado la guitarra al revés con total maestría?... ¿Siquiera a escrito un puto cuento? No. Entonces de que estamos hablando. Olvídese de esta mierda y póngase a producir. O mejor, córtese esas mechas, cosa esos pantalones, cámbiese esos zapatos, compre una minerva 1003 y entienda que la vida se gana trabajando, que el talento no lo hace la pinta y que los sueños, sueños son. ¡inepto!

No hay comentarios:

Publicar un comentario